Perderse

Narrado en forma de diario ?ntimo, Ernaux nos cuenta en Perderse la relaci?n sentimental que mantuvo en secreto durante varios a?os con un diplom?tico ruso. «Nunca supe nada de sus actividades que, oficialmente, eran de orden cultural. Me sorprende hoy que no le hiciera m?s preguntas. Nunca sabr? tampoco qu? fui para ?l. Su deseo de m? es lo ?nico de lo que estoy segura. Era, en todos los sentidos del t?rmino, la amante en la sombra. Soy consciente de que publico este diario por una especie de prescripci?n interior, sin preocuparme por lo que ?l, S., pueda sentir. A buen derecho, podr? estimar que se trata de un abuso de poder literario, incluso de una traici?n. Concibo que se defienda mediante la risa o el desprecio, „no me ve?a con ella m?s que para echar un polvo“. Preferir?a que aceptara, aunque no lo entienda, haber sido durante meses, sin que ?l lo supiera, ese principio, maravilloso y terror?fico, de deseo, de muerte y de escritura.»