Resumen del libro "Antifrágil"

Pensemos en algo fr?gil, alg?n objeto de nuestra sala de estar, como el televisor o la porcelana del aparador. Si los etiquetamos como «fr?giles» significa, necesariamente, que queremos que gocen tranquilidad, orden y previsibilidad. A un objeto fr?gil no le sentar? nada bien un terremoto ni la visita de un sobrino hiperactivo. Todo lo que aborrece la volatilidad aborrece los agentes estresantes (estresores), el da?o, el caos, los sucesos, el desorden, las consecuencias imprevistas, la incertidumbre y, por encima de todo, el tiempo. En el lado opuesto a lo fr?gil hay cosas que se benefician de las crisis; prosperan y crecen al verse expuestas a la volatilidad, al azar, al desorden y a los estresores, y les encanta la aventura, el riesgo y la incertidumbre. Pero, a pesar de la omnipresencia de este fen?meno, no existe una palabra que designe exactamente lo contrario de lo fr?gil. Aqu? lo llamaremos antifr?gil. Pensemos, por ejemplo, en Suiza, el lugar m?s antifr?gil del planeta, ya que se beneficia de las crisis que se dan en el resto del mundo. La antifragilidad es m?s que resiliencia o robustez. Lo robusto aguanta los choques y sigue igual; lo antifr?gil mejora. Esta propiedad se halla detr?s de todo lo que ha cambiado con el tiempo: las revoluciones, la innovaci?n tecnol?gica, el ?xito cultural, la supervivencia empresarial, las buenas recetas de cocina, el ascenso de ciudades, las bacterias resistentes… incluso nuestra existencia como especie. La antifragilidad es relativa a una situaci?n dada. Un boxeador puede ser robusto, sano en lo que se refiere a su condici?n f?sica, y puede mejorar de un combate al siguiente, pero podr?a ser emocionalmente fr?gil y romper a llorar si su novia lo dejara. Nuestras abuelas podr?an tener o haber tenido unas cualidades opuestas: una complexi?n fr?gil y una fuerte personalidad. El objetivo ?ltimo de este libro es descubrir aquellas reglas que nos permitan pasar de lo fr?gil a lo antifr?gil reduciendo la fragilidad o controlando la antifragilidad.