Uno es un n?mero solitario

Larry Camonille est? en fuga. Despu?s de escapar de la c?rcel, se detiene, con su pulm?n sobreviviente, a tomar aliento y a recuperar el gusto por la vida en una pensi?n de un pueblo de Ohio. Pero sigue en fuga. Nada lo har? retroceder. Necesita llegar hasta M?xico y sus obst?culos tendr?n forma de mujer: Vera, una viuda con cierta debilidad por la bebida, y la irresistible Jan, una ninfa de catorce a?os. Cada una lo seduce y esconde un plan criminal distinto para ?l. La intensidad narrativa la da el ritmo card?aco de la escapatoria. As? como la banda de sonido en sordina –Camonille es trompetista, admira a Dizzy Gillespie–, la novela se las arregla para componer una atm?sfera que no da respiro. Din?mica hasta la impaciencia, la trama se come al lector: todos terminar?n, tarde o temprano, probablemente a destiempo, en el mismo sitio, el infierno del thriller.